domingo, 14 de febrero de 2010

El año nuevo chino: Una experiencia muy occidental

El domingo fuimos a bienvenir el año al barrio chino, comimos arrolladitos, tomamos cerveza con ideogramas, hubo quien se comprò un abanico y vimos pasar al dragòn unas cuantas veces. Podrìa haber sido una experiencia exòticamente ètnica, pero debo admitir que nos llevamos una sorpresa cuando nos sobraban los dedos de la mano para contar la gente con ojos achinados. Las calles, los puestos, sì, hasta tristemente el dragón estaba siendo llevado por gente rubia o de bobos ojos redondos. Llegamos a la conclusiòn de que los chinos habiendo contratado mano de obra barata estaban festejando el nuevo año en punta del este o pinamar.

No hay comentarios: