Salimos de ese universo de baba, de ese festival de fluidos de bocas abiertas y de manos convulsas. Nos salimos de una película monstruosa de màscaras y pelucas, de mutantes y hombres x.
Y descubrimos la risa.
Nos reìmos una cuadra entera tal vez dos, con la sensación rara de no estar seguras de nosotras mismas, acaso de nuestra moral, de carcajear en un mundo en el que cabían tantas cosas terribles.
La risa salva. Recorre el cuerpo sumergido en la inmundicia haciéndolo saltar y tomar aire para no morir entre la porquería. Encontramos la risa como la única opciòn para seguir andando frente a la muerte, la violaciòn, la miseria. Llorar no puede ser la opciòn eterna porque detiene. La risa tampoco, pero salva.
2 comentarios:
qué lindo Mana
oh... la risa
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